En el difícil Tour (tiempo-distancia) las cosas tampoco fueron fáciles aunque a lo largo de los tres días, Mario Medina y su hijo Carlos se impusieron con un rally casi perfecto en un Porsche Carrera 4 Cabrio. 

Antes de arrancar se realizó un ritual Tarahumara para bendecir los cascos de los competidores de nueve naciones. Como siempre, los paisajes, las estupendas carreteras y el total apoyo de las autoridades se llevaron las palmas de los asistentes que ya confirmaron su participación al Chihuahua Express Presented by Good Year en el 2016.